En este sentido, se están elaborando una serie de propuestas que se trasladarán al IMSERSO próximamente
Es importante tener en cuenta que, en su condición de centros sanitarios, son muchos los Balnearios que ofrecieron a las autoridades sus instalaciones para que hicieran el uso que determinaran y fuera necesario para hacer frente a la pandemia, y que disponen de equipo médico propio y servicios de consulta
Los Balnearios son un sector fundamental para el desarrollo de áreas rurales de la España vaciada. La gran mayoría se encuentran situados en comarcas en las que estos establecimientos se convierten en la actividad económica fundamental del territorio dando trabajo a prácticamente 10.000 personas, entre empleos directos e indirectos, el 70% de ellas mujeres. Por este motivo, subrayan la importancia de reiniciar la actividad tan pronto como las circunstancias lo permitan
MADRID 9-4-2020. La Asociación Nacional de Balnearios (ANBAL) ha celebrado su Junta Directiva para analizar la situación generada en el sector termal debido a la expansión del coronavirus y el obligado cierre de los establecimientos decretado por el Gobierno. Conscientes de la difícil situación que vive el país en su conjunto, los Balnearios abordaron cuestiones relacionadas con el ámbito laboral y financiero del sector para dar respuesta a las consecuencias económicas y sociales derivadas del cese de la actividad y la suspensión del Programa de Termalismo del IMSERSO.
Es importante destacar que los Balnearios tienen la condición de centros sanitarios y disponen de equipo médico propio. Por este motivo, son muchos los establecimientos que han ofrecido a las autoridades sanitarias sus instalaciones cuando se decretó el estado de alarma.
La Junta Directiva analizó la posibilidad de reiniciar la actividad del sector cuanto antes, así como reanudar la ejecución del Programa de Termalismo de este año 2020. Al disponer de equipos médicos propios e instalaciones como consultas y otras salas registradas en Sanidad, los Balnearios pueden contribuir, también desde el punto de vista sanitario y en la forma en que se determine, al proceso de desescalamiento de las medidas de confinamiento que se está diseñando, pudiendo albergar en sus instalaciones personas de diferentes edades y patologías como históricamente vienen haciendo.
Por este motivo, la Junta aprobó por unanimidad buscar formulas para proponer al IMSERSO que permitan la ejecución presupuestaria en el mayor porcentaje posible del Programa, a partir del momento en el que se autorice la reapertura por parte del Ministerio de Sanidad de los establecimientos hoteleros. Tal y como subraya Miguel Mirones, presidente de ANBAL, “no renunciamos a ejecutar el presupuesto del IMSERSO porque somos conscientes de nuestra realidad empresarial en la que se une nuestra condición de hoteles con la de centro sanitario, y de las negativas consecuencias que la no apertura de los establecimientos puede tener para todos los territorios donde nos encontramos ubicados”.
Además, “es un sector fundamental para el desarrollo de áreas rurales de la España vaciada. La gran mayoría de los Balnearios se encuentran situados en comarcas en las que estos establecimientos se convierten en la actividad económica fundamental del territorio y actúa como tractor económico del comercio y los servicios complementarios de la zona, dando trabajo a prácticamente 10.000 personas, entre empleos directos e indirectos, el 70% de ellas mujeres”.
Por este motivo, el presidente de ANBAL quiere destacar que “si los Balnearios no reinician su actividad, las zonas rurales en las que se encuentran ubicados se van a enfrentar a graves problemas económicos derivados de la inexistencia de otro tipo de alternativas que generen empleo y actividad económica”.
El Programa de Termalismo Social de IMSERSO ofrece anualmente más de 208.000 plazas para que los pensionistas disfruten de los beneficios para su salud de las Aguas Mineromedicionales, y está enmarcado dentro de los Programas de Envejecimiento Activo diseñados en su día desde el Ministerio de Sanidad. El IMSERSO depende actualmente de la Vicepresidencia Tercera de Derechos Sociales y Agenda 2030.
ANBAL también se ha ofrecido, en nombre de los Balnearios españoles, a participar en los proyecto que se puedan poner en marcha para rediseñar los productos turísticos y sus entornos desde la óptica de la seguridad sanitaria, seguridad que va a demandar la sociedad dada la nueva realidad existente.
En lo que se refiere a la cuestión económica y laboral, la Junta Directiva de ANBAL aprobó adherirse a las demandas planteadas desde la Confederación Española de Hoteles y Apartamentos Turísticos (CEHAT) al Gobierno de España solicitando medidas encaminadas a que las empresas dispongan de liquidez de forma inmediata, para de esta forma puedan seguir enfrentándose a estas semanas sin actividad. Del mismo modo ocurre en lo que se refiere al ámbito laboral, donde desde CEHAT se ha solicitado articular soluciones adaptadas al sector hotelero.
