El escritor y premio planeta, Juan Eslava Galán, en su libro 1.000 sitios que ver en España al menos una vez en la vida, no se olvidó de este singular lugar, debido en gran parte a las Aguas minero medicinales que brotan de forma natural y abundante.
El Balneario de Alicún de las Torres, ubicado en un entorno rural mágico, natural y singular, alejado de importantes núcleos urbanos, resulta un auténtico oasis en medio de una zona esteparia, constituyendo un centro de salud para el cuerpo y el espíritu donde sus visitantes pueden recuperar el bienestar perdido, además de reencontrarse con sus propias emociones y sentimientos olvidados.
El aprovechamiento de las Aguas del Balneario de Alicún de las Torres, como propuesta de sanación natural, es muy anterior a la época romana, como lo prueban las construcciones funerarias del periodo neolítico. Esta forma milenaria de sanar, paliar o prevenir dolencias mediante el Agua termal natural, ha convertido al Balneario de Alicún de las Torres en una propuesta única para cuidarse y ser cuidado.
Si se entiende que “la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades” (definición según la OMS, 1948), en el Balneario de Alicún se encuentran propuestas holísticas que buscan soluciones terapéuticas efectivas, de carácter preventivo, de bienestar, estética o relax.
La oferta cultural y de ocio complementaria, cuenta, entre otros atractivos, con la piscina termal al aire libre más grande de Andalucía, el distintivo “Starlight”, al ser el primer Balneario que ha conseguido certificar la calidad de su cielo, y una amplia oferta en colaboración con profesionales, encaminada a promover propuestas saludables.
