Balneario de Villavieja, fuente de bienestar

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Balneario_Villavieja_fachadaNo hay muchos establecimientos en nuestro país que puedan presumir de una ubicación tan privilegiada como este balneario, la hermosa comarca de la Plana Baixa en Castellón. Las aguas mineromedicinales de Villavieja, o la Vila Vella, son conocidas desde tiempos remotos por sus propiedades benéficas para la salud. Los pobladores romanos, expertos en el termalismo, ya aprovecharon sus aguas, debido a su fuerte presencia en la zona, muy cercana a la antigua ciudad de Sagunto. Los huéspedes del balneario de Villavieja que tengan curiosidad histórica pueden acercarse a conocer los restos del antiguo santuario de Apolo, cercano a la población. Puede hablarse de una explotación comercial de esta agua a partir del XVIII.

La calidad de estas aguas no podía quedar en secreto, así que durante este siglo creció la afluencia de visitantes a esta localidad levantina que llegó a contar en 1898 con, nada menos, once balnearios y casas de baño activas. Para dar muestra de la magnitud de este crecimiento cabe reseñar que Villavieja, que tenía dos mil habitantes, recibía cada año once mil visitas. Balneario Villavieja chorrosLa Guerra Civil y la trágica posguerra interrumpieron esta prosperidad, ya que muchos de estos baños quedaron dañados en la contienda. Los que no desaparecieron, comenzaron un proceso de fusión hasta quedar un solo establecimiento.

El Balneario presenta su mejor cara, a la altura de su pasado, gracias a una reciente reforma en la zona termal. En estas obras se construyeron una Piscina Termal Activa y un Pasillo Flebotónico, que viene a implementar la oferta de este establecimiento. El hotel incluye en sus instalaciones, tres plantas, todo ello en un solo edificio que está conectado con el Centro Termal gracias a dos ascensores. Aquellos usuarios aquejados de problemas de salud pueden hallar alivio a sus afecciones ya que sus aguas, que nacen a 40 ºC, cuentan con numerosas cualidades.

Balneario Villavieja terapiasSon laxantes, sedantes, diuréticas, aumentan la secreción biliar y regulan el equilibrio neurovegetativo. Además relajan la musculatura y ligamentos, con su acción analgésica y descontracturante. El abanico de dolencias que aquí se tratan es, sin lugar a dudas, amplísimo. De tal forma que los aquejados de problemas en el aparato locomotor (artritis, artrosis, ciáticas, contracturas o fibromialgias), en el aparato respiratorio (bronquitis, EPOC, asma, rinitis, faringitis o laringitis) o diversas enfermedades (gota, litiasis renal y hepática, dispepsia e inestabilidad nerviosa) encuentran en este Balneario un lugar idóneo para recobrar su salud.